La Astrología fue mi gran ahá-moment, el punto de inflexión que me permitió transformar por completo mi enfoque como CEO.

Llegué a ese momento desde un lugar de desconexión total con mi marca. No sabía cómo encarar cada día, qué mensaje compartir ni cómo expresarme. Me consumía lo que hacían mis colegas, comparándome constantemente, lo que apagaba mi energía poco a poco.

Al mismo tiempo, mi atención estaba enfocada en alcanzar nuevas metas financieras, viendo a cada persona como un número y cayendo de nuevo en la matrix de la que juraba haber salido. Esa desconexión no solo me alejaba de mi propósito verdadero, sino que me hacía olvidar por completo por qué había comenzado mi marca personal. Era como una especie de amnesia que yo misma había creado.

Para darte un poco de contexto, vengo emprendiendo desde 2014. Al poco tiempo de iniciar este camino, descubrí el concepto de marca personal y sentí una conexión profunda con la idea, pero no me sentía lista. No creía que mi nombre fuera suficiente para liderar un proyecto auténtico.

Durante esos años, fundé diferentes proyectos, desde marcas de productos físicos hasta servicios que me llevaron a salir de mi zona de confort y explorar mis dones y talentos de manera exponencial. Cada uno de ellos fue una gran escuela, enseñándome lecciones invaluables sobre liderazgo, resiliencia y creatividad. Estoy profundamente agradecida por cada etapa y por haber sido el canal de esos aprendizajes.

Finalmente, en julio de 2023, decidí enfrentar mis miedos y crear una marca con mi propio nombre. Fue un momento decisivo en mi vida, una reconexión con mi esencia y una apuesta por mi verdad.

Mi historia personal también forma parte de este recorrido. Soy de Buenos Aires, Argentina, de una familia que valoraba el esfuerzo y la superación. Aunque los recursos fueron limitados, siempre hubo una mirada de progreso y un apoyo incondicional para cumplir mis sueños. Mis padres me enseñaron que la información es poder, y esa enseñanza me impulsó a estudiar, crecer y buscar nuevas oportunidades.

Ese contexto me llevó a ver en la universidad una forma de progresar económicamente, y cuando descubrí el mundo del emprendimiento, sentí un llamado profundo. Siempre tuve la certeza de que mi vida sería transformadora, no solo para mí, sino también para quienes eligieran acompañarme. Fundar mi propia marca, hacer lo que amo, inspirar a otras personas y ganar dinero mientras lo hacía era un sueño que me atrapó desde el inicio.

Sin embargo, caí en mi propia trampa. Llevé la misma presión que tenía en la universidad al mundo emprendedor: la exigencia de hacer lo que "tenía que hacer", formarme, encontrar un buen trabajo, ascender, cambiar de industria, "evolucionar" y acumular bienes materiales. Todo esto me llevó a sentirme atrapada. Y aunque dejé ese esquema para dedicarme exclusivamente a emprender, terminé repitiendo el ciclo en una nueva forma.

Cuando me di cuenta de que lideraba mi marca personal con el único objetivo de crecer financieramente, sin importar el cómo, el cuándo o el con quién, fue como un flashback que me despertó. Y fue entonces cuando la Astrología llegó a mi vida de forma definitiva.

Una herramienta que conocía desde niña, pero que no había conectado profundamente porque la percibía como algo pasivo, casi justificativo. Con el tiempo, entendí que la Astrología es mucho más que autoconocimiento: es un puente estratégico, una herramienta activa que transforma cuando te permites experimentarla.

En este proceso descubrí algo esencial: la búsqueda de la paz fue el hilo conductor de todas mis transformaciones. Me di cuenta de que esa paz no venía de las circunstancias externas, sino de hacerme cargo de quien realmente soy. Cuando abrazo mi verdad, encuentro mi propia paz.

Hoy en día, lidero dos proyectos: mi marca personal, que refleja mi esencia y propósito, y La Energuía, un espacio en el que fusiono mi pasión por la astrología y el acompañamiento estratégico.

Y esa es la invitación que hago: conectar profundamente con tu marca, sin obsesionarte con la facturación y siendo quien eres.

El resultado: una marca próspera, genuina y que genera conexión desde su verdad.

¿Sientes el llamado?

Bienvenida seas. 🧿🏹💗